domingo, 6 de julio de 2008

Experto asegura que "generación Facebook" es incapaz de tener amistades duraderas.

Viernes 4 de Julio de 2008
07:44
EFE

LONDRES.- La generación de Facebook, MySpace y otras redes sociales, es incapaz de amistades duraderas y corre un grave riesgo de comportamiento compulsivo, según un experto del West London Mental Health Truth.

Los adolescentes nacidos a partir de 1990 no conocen un mundo en el que no se podía aún navegar por internet y pueden tener por tanto una visión distorsionada de la realidad y de su propia identidad, afirmó el psiquiatra Himanshu Tyagi en la reunión anual del Real Colegio de Psiquiatras del Reino Unido.

Tyagi se refirió a una reciente epidemia de suicidios de adolescentes en la localidad británica de Bridgend y explicó que los suicidas tenían en común el hecho de utilizar internet para comunicarse, según informa hoy el diario “The Daily Telegraph”.

"Es un mundo en el que todo sucede deprisa, en que todo cambia además continuamente y en el que basta hacer clic con el ratón del ordenador para poner fin a una relación,” dijo el psiquiatra.

"Un mundo, continuó el experto, en el que uno puede borrar su propio perfil si es que no le gusta, y cambiar en un santiamén su identidad por otra más aceptable,” agregó Tyagi.

Según el experto, “las personas acostumbradas a la velocidad de las relaciones sociales en internet pueden encontrar aburrido el mundo actual, lo que podría llevarlos a comportamientos más extremos en busca de excitaciones.”

"Cuando uno no ve la expresión de la otra persona, su lenguaje corporal ni oír las sutiles alteraciones en la voz, es lógico que cambie su forma de percibir esa interacción,” agregó Tyagi.

Reconoció, sin embargo, que el mundo virtual tiene también sus ventajas como es la no discriminación - es un mundo en el que la riqueza, la raza y el sexo tienen menor importancia- y la pérdida de fronteras geográficas.

"Nadie es un paria en la red,” dijo el psiquiatra, según el cual internet contribuye a eliminar en gran medida las jerarquías del mundo real.

Una Operaciòn impecable.

Karin Ebensperger
Viernes 04 de Julio de 2008
Todos podríamos ser Ingrid Betancourt (II)

Hace unos meses escribí en esta columna que mientras Ingrid Betancourt y hasta el último de los rehenes de las FARC no sean liberados, las declaraciones y recurrentes discursos sobre la hermandad de los pueblos caerán en el vacío. Ella, gracias a Dios, acaba de ser rescatada tras seis años de martirio, pero aún hay unos 3 mil rehenes en poder de las FARC.

Digámoslo claramente, las FARC no habrían tenido "éxito" en su capacidad de ocupar gran parte de Colombia y asesinar y secuestrar durante 40 años si las ideologías no estuvieran tan presentes aún en los gobiernos de Latinoamérica.

Por largos períodos, en vez de que todos los mandatarios de la región estuvieran de acuerdo en que no se pueden aceptar los secuestros nunca jamás, y que se debe terminar con esa guerrilla terrorista, hay gobiernos que han mostrado comprensión por las motivaciones de las FARC, como el de Cuba y el de Hugo Chávez de Venezuela.

En su momento el ex Presidente argentino Néstor Kirchner fue a Venezuela a apoyar a Chávez en un supuesto plan para liberar rehenes que resultó en un fiasco, mientras el mismo gobierno argentino y otros de la región miraban con desprecio al Presidente colombiano Álvaro Uribe, por no ser de sus mismas ideas políticas.

El tiempo se encargó de poner las cosas en su lugar. El gobierno de Colombia, en una acción seria de inteligencia, rescató a Ingrid Betancourt y a otros 14 rehenes sin disparar una sola bala. Como dijo la propia Ingrid, una operación impecable.

Insisto en lo que dije en esa columna anterior: hay ciertos fundamentos éticos, ciertos principios incuestionables sin los cuales no se puede dar una convivencia en sociedad. Las personas tienen derechos anteriores al Estado, y el fin no justifica los medios. Si no se aceptan esas certezas mínimas, no se pueden construir instituciones sociales. Algo de eso ocurre en nuestra región.

Los secuestros son siempre abuso, dolor, muerte. Y los miembros de las FARC, mientras mantengan rehenes y asesinen campesinos, deberían ser catalogados por todos los presidentes latinoamericanos como lo que son: terroristas.

En la medida en que haya un solo Presidente latinoamericano que simpatice con las FARC u otros extremistas de esa naturaleza, todos somos potenciales víctimas.